jueves, 11 de septiembre de 2014

Oración de la casulla


Mientras el sacerdote se reviste la casulla dice la siguiente oración:

“Dómine, qui dixísti: Iugum meum suáve est et onus meum leve: fac, ut istud portáre sic váleam, quod cónsequar tuam grátiam. Amén.”

Lo que puede traducirse como: “"Señor, que dijiste: ‘Mi yugo es suave y mi carga ligera’: haz que lo lleve de tal manera que alcance tu gracia. Amén”.


De esta oración se desprende que la casulla simboliza el yugo del Señor. A partir de este simbolismo, el papa Benedicto XVI en la Misa Crismal de 2007 explicó este significado en su homilía:

“Llevar el yugo del Señor significa ante todo: aprende de Él. Estar siempre dispuestos a asistir a la escuela de Jesús. De Él debemos aprender la pequeñez y la humildad –la humildad de Dios que se muestra en su ser hombre.

Algunas veces quisiéramos decirle a Jesús: Señor, tu yugo no es para nada ligero. Más bien, es tremendamente pesado en este mundo. Pero al mirarlo a Él que ha cargado con todo, que en sí ha probado la obediencia, la debilidad, el dolor, toda la oscuridad, entonces todos nuestros lamentos se apagan.

Su yugo es el de amar con Él. Y mientras más lo amamos, y con Él nos convertimos en personas que aman, más ligero se vuelve nuestro yugo aparentemente pesado.


Oremos para que nos ayude a ser junto con Él personas que aman, para experimentar así siempre más cuán bello es portar su yugo”

No hay comentarios:

Publicar un comentario