miércoles, 29 de octubre de 2014

Misas por papas y cardenales difuntos

Ayer comentábamos que en las misas de difuntos se utilizan ornamentos de color morado o negro. Sin embargo, cuando la misa es por el eterno descanso de un cardenal o de un papa, se usan ornamentos rojos.


Les dejo una foto del Card. Ratzinger presidiendo el funeral de San Juan Pablo II con ornamentos rojos.  

martes, 28 de octubre de 2014

Ornamentos negros

En la conmemoración de los fieles difuntos, el 2 de noviembre, suele utilizarse el color morado. Pero también pueden usarse ornamentos negros de acuerdo a la Instrucción General del Misal Romano (n. 346).

En lo personal, me parece más oportuno porque distingue un color penitencial de un color de luto.

Les dejo unas fotos de ornamentos negros:



lunes, 27 de octubre de 2014

Misas por los pontífices difuntos


Noviembre es un mes en el que la Iglesia nos invita a rezar por los fieles difuntos. Es por ello que es costumbre que el Santo Padre realice dos actos concretos de oración por los difuntos:

1.- El 2 de noviembre, conmemoración de los fieles difuntos, acude a las grutas vaticanas y ora durante unos momentos por todos sus predecesores que se han dormido en el Señor.

2.- En otra fecha (este año será el 3 de noviembre) celebra una misa en la que pide por el eterno descanso de los cardenales y obispos fallecidos en el último año.

Adicionalmente existe la costumbre de que el Santo Padre celebra una misa por el eterno descanso de su último predecesor fallecido. Esta se celebra en la fecha en que es aniversario del deceso del Pontífice.

Esta costumbre no se ha seguido desde el 2010. ¿La razón? En 2011 fue beatificado Juan Pablo II, por lo que no puede pedirse por su eterno descanso, ya que existe la certeza de que está en la presencia de Dios como se ha decretado en su beatificación.

Por este motivo, hasta que exista un papa muerto y no beatificado o canonizado se volverá a celebrar una misa en sufragio por su alma.


Durante el pontificado de San Juan Pablo II, todos los años celebró una misa por su predecesor Juan Pablo I, y además, el papa siempre quiso que en esa misa se pidiera por Pablo VI, quien nunca tuvo una misa derivado del corto pontificado de papa Luciani.

La foto de la entrada es de la última misa por el eterno descanso de Juan Pablo II, en 2010. 

viernes, 24 de octubre de 2014

La comunión bajo dos especies

Desde el Concilio de Trento la fe católica enseña que quien comulga bajo una sola de las dos especies (pan o vino) se recibe a Cristo todo e íntegro y el verdadero Sacramento; y que, por consiguiente, no se priva de ninguna gracia necesaria para la salvación a quienes sólo reciben una de las especies.

A partir de ello, la forma mas común de comulgar es sólo recibiendo el Cuerpo de Cristo. Sin embargo, hay casos en que la comunión se hace bajo las dos especies. Esto hace necesario determinar de qué forma se puede comulgar la Sangre de Cristo. Al respecto existen dos formas:

1.- Bebiendo el cáliz. Así, quien va a comulgar, después de haber recibido el Cuerpo de Cristo, pasa al ministro del cáliz y permanece de pie ante él. El ministro le dice: La Sangre de Cristo; quien va a comulgar responde: Amén; y el ministro le entrega el cáliz, para que lo lleve a la boca el mismo que va a comulgar, con sus manos.

2.- Por intinción (intinción significa sumergir algo en un líquido) En este caso,   quien va a comulgar, teniendo la patena debajo de la boca, se acerca al sacerdote, quien sostiene el vaso con las sagradas partículas y a cuyo lado se sitúa el ministro que sostiene el cáliz. El sacerdote toma la Hostia, moja parte de ella en el cáliz y, mostrándola, dice: El Cuerpo y la Sangre de Cristo; quien va a comulgar responde: Amén, recibe del sacerdote el Sacramento en la boca, y en seguida se retira.

Además, en los ritos orientales se hace distribuye la Sangre de Cristo con una cucharilla en la boca del fiel, mientras los diáconos extienden un paño rojo entre el cáliz y el fiel por si se derrama algo de la Preciosa Sangre.


Dejo una foto de San Juan Pablo II dando la comunión de esta forma oriental.

jueves, 23 de octubre de 2014

El beso litúrgico


Junto con las dos formas de inclinación y la genuflexión, el beso es otra forma externa de veneración en la liturgia.

Ordinariamente se dan tres besos durante la misa:

1.- Al inicio de la misa, el diácono y el sacerdote, después de saludar al altar con una inclinación profunda, lo besan.

2.- Después de que se proclama el Evangelio, el celebrante principal lo besa mientras dice en secreto: “Las palabras del Evangelio borren nuestros pecados”

3.- Al final de la misa, el sacerdote y el diácono besan en altar después de la bendición final y después se inclinan profundamente frente al altar junto con los demás ministros.